La Ley de Valores de 1933 tiene dos objetivos primarios:
- Exigir que los inversionistas reciban información financiera, así como otra información relevante respecto a los valores ofrecidos para la venta pública; y
- Prohibir el engaño, las falsas representaciones y demás tipos de fraude en conexión con la venta de valores.
La SEC logra estas metas principalmente al exigir que las compañías divulguen información financiera importante a través del registro de valores. Esta información facilita que los inversionistas, y no el gobierno, formen opiniones informadas acerca de si invertir en los valores de una compañía. Éste es un resumen de cómo funciona el proceso de registro. Generalmente, todos los valores ofrecidos en los Estados Unidos deberán registrarse ante la SEC o calificar para una exención de los requisitos de registro. Los formularios de registro que una compañía presenta ante la SEC proporcionan información importante, incluyendo:
- Una descripción de los bienes y negocios de una compañía;
- Una descripción del valor que se ofrece para la venta;
- Información acerca de la administración de la compañía; e
- Informes financieros certificados por contadores independientes.
Las declaraciones y prospectos de registro son divulgados al público pronto después de ser presentados por una compañía ante la SEC. Toda compañía, tanto doméstica como extranjera, está obligada a presentar declaraciones de registro y otros formularios electrónicamente. Los inversionistas pueden entonces tener acceso al registro y las demás tramitaciones de la compañía a través de EDGAR.
No toda oferta de valores tiene que registrarse ante la SEC. Las exenciones más comunes de los requisitos de registro incluyen:
- Ofertas privadas a un número limitado de personas o instituciones;
- Ofertas de tamaño limitado;
- Ofertas de un estado a otro; y
- Los valores de gobiernos municipales, estatales y federales.
Al eximir a muchas ofertas pequeñas del proceso de registro, la SEC busca fomentar la creación de capital mediante la disminución del costo asociado con la oferta de valores a inversionistas.
La División de Finanzas Corporativas podrá examinar la declaración del registro de una compañía para determinar si cumple con nuestros requisitos de divulgación. Sin embargo, la SEC no evalúa los méritos de las ofertas ni tampoco determinamos si los valores ofrecidos son “buenas” inversiones.
En tanto que las reglas de la SEC exigen que las compañías provean información precisa y veraz, la SEC no puede garantizar la exactitud de la información que contienen las tramitaciones de una compañía. De hecho, todos los años la SEC entabla acciones de aplicación de la ley contra compañías que han omitido proveer información importante a los inversionistas. Aquellos inversionistas que compran valores y sufren pérdidas deberán saber que tienen derechos importantes en materia de recuperación si pueden demostrar que la divulgación de información fue incompleta o imprecisa.